No estoy de broma: justo el otro día vi un artículo en una web para gente normal donde se decía eso mismo.
El estoicismo está de moda.
Quizá ha vuelto la moda, o quizá nunca se fue.
Son más conocidos romanos estoicos como Séneca o el famoso Marco Aurelio que el propio fundador del estoicismo, Zenón de Citio.
Entre la obra de Séneca, encontramos las Cartas morales a Lucilio. Cambiando unas pocas cosas, cada una de las cartas podría colar como un artículo de un blog de principios del siglo XXI.
Si empezamos por la primera, Séneca trata sobre el enorme valor del tiempo y cómo la mayoría de la gente simple y llanamente lo desperdicia.
Persuádete de que esto es así como escribo: algunos tiempos nos son robados, algunos nos son sustraídos, algunos se van. Sin embargo, la más vergonzosa pérdida es la que ocurre por negligencia. […] Todas las cosas, Lucilio, son ajenas: solo el tiempo es nuestro. La naturaleza nos ha puesto en posesión de esta única cosa fugaz y resbaladiza, de la que nos expulsa cualquiera que quiere.
Ahora también, entre los materiales complementarios del curso de latín desde cero, nos ponemos a trabajar con las epístolas de Séneca.
¡Un saludo!
Paco
P. S. Si eres nuevo en esto del estoicismo, Invicto, de Marcos Vázquez, es una estupenda introducción.