Si uno lee textos medievales, puede encontrarse cosas como estas de Berceo:
Señores, si quisiéssedes atender un poquiello,
querría vos contar un poco de ratiello
un sermón que fo priso de un santo libriello
que fizo sant Jerónimo, un precioso cabdiello.
Entre otros rasgos arcaicos, vemos esos diminutivos en -iello que posteriormente pasarán al actual -illo.
Esto no solo ocurría en este tipo de diminutivos, sino también en otro tipo de palabras donde efectivamente deberíamos tener ie, en lugar del actual i.
Además, de forma análoga, hay casos como culuebra y fruente donde actualmente tenemos e en lugar de ue.
Estos cambios los explico aquí:
¡Un saludo!
Paco
P. S. Perezoso, ¿fasta quándo duermes?; ¿fasta quándo te levantarás del sueño? Dígotelo: – Poco te dormirás, poco te adormeztrás, mucho poquiello ayuntarás tus manos que fuelgues.