En latín la V podía funcionar de semiconsonante, es decir, era /w/, como la w del inglés.
Por lo general, [w] es un sonido bastante inestable: tanto, que la *w del protoindoeuropeo apenas se conserva en las lenguas actuales.
Eso sí, da la casualidad de que se conserva en la que ha venido a ser la lengua franca actual. Pero incluso en lenguas hermanas como el alemán esa antigua *w pasó a /v/ o similar.
Por eso uno de los estereotipos de los alemanes cuando hablan inglés (al menos en las películas) es pronunciar la w inglesa como v (y además pronunciar th /ð/ como z /z/, lo cual me irrita especialmente).
Y es que efectivamente en alemán no hay /w/, porque la antigua *w en la mayoría de las lenguas germánicas acabó como /v/.
Eso mismo le pasó al latín, que ya en el siglo I tenía pronunciación [β] de V, y eso tuvo diversos resultados en las lenguas romances.
Como ya sabes, en español actual b y v tienen la misma pronunciación, pero no en otras lenguas romances. Sin embargo, como sugiero e ilustro en el vídeo, esa /v/ romance debe de ser bastante tardía.
¡Un saludo!
Paco
P. S. El vídeo es dificilón, pero interesante. ¡Suerte!