Durante mucho tiempo siempre tenía la duda de si el nombre del arquitecto Vitruvio era las dos con ‹v› o la segunda con ‹b› (me imagino que la confusión era por el monte Vesubio…).
Curiosamente, todos conocemos a Vitruvio, pero, salvo arquitectos (etc.), no es por su papel arquitectónico, sino por el «Hombre de Vitruvio» o «Estudio de las proporciones ideales del cuerpo humano» de Leonardo da Vinci.
Por eso Vitruvio decía que éramos unos idiotas.
…
Es broma.
Pero sí es verdad que Vitruvio habla de los idiotas en su tratado De architectura:
todos los hombres, no solo los arquitectos, pueden comprobar lo que es bueno, pero la diferencia entre los legos y los arquitectos es esta: que el lego no puede saber lo que habrá hasta que lo vea hecho, mientras que el arquitecto, en cuanto lo pone en su mente, tiene nítido en su mente la belleza, la conveniencia y la elegancia de lo que habrá incluso antes de comenzar.
Me gusta esa cita no solo en su sentido literal, sino también en el metafórico, e incluso por la belleza con la que está enunciada (y no hablo de la traducción de un servidor).
Ahora igual estás pensando que este correo es clickbait porque Vitruvio no habla de idiotas en ninguna parte…
… pero en el original en latín «legos» = idiotae…
… porque idiota tuvo diversos significados en latín, y ya desde sus anteriores orígenes griegos.
Hablo de todo ello en este artículo (con vídeo) sobre la etimología de «idiota».
¡Un saludo!
Paco
P. S. Por increíble que parezca, aún en el siglo XVI la palabra «idiota» se sentía ajena al español. De eso también hablo.