¡Hola! Gracias por tu interés en invitarme a tu evento, sarao, charla, conferencia, presencial o por internet. Por favor, ante todo lee el apartado de contacto si no lo has hecho ya.
Yo no soy conferenciante ni espíquer, por lo que, en principio, es bastante probable que no acepte tu invitación; nada personal: simplemente no suelo hacer este tipo de cosas. (Además, la mayoría de experiencias pasadas han sido bastante negativas).
Aun así, como nunca debe decir uno «de esta agua no beberé», es posible que sí acepte tu invitación. A continuación doy unas cuantas claves que quiero que trates en tu propuesta.
Es muy importante que en tu mensaje no trates de venderme la moto. No intentes disfrazar tu evento de lo que no es, ni trates de darle más caché del que tiene, etc. En fin, creo que sabes perfectamente a qué me refiero.
Otro punto importante es que entiendas que yo tengo mi vida, mis obligaciones, mis planes, mis preferencias y mi libertad de decir que no por cualquier razón (e incluso de no responder si tu propuesta es escandalosa).
Indícame de forma clara y concisa de qué va el evento en general, cuándo y dónde es y cuánto tiempo calculas que dure mi supuesta intervención. Dime qué esperas de mí y de qué se supone que hablaría. ¿Habrá otros participantes? ¿Quiénes? ¿De qué tipo es el público? ¿Va de buen grado u obligado?
Lo más probable es que tu evento presencial no sea a diez minutos de mi casa, por lo que es fundamental que me digas sin tapujos si se cubrirían los gastos de desplazamiento en un medio de transporte razonable y la pernoctación en caso de ser necesario. No digo que hayan de estar incluidos, pero me parece razonable que yo sepa si sí o si no desde el principio.
Ahora sí que sí entramos en harina. Dime qué saco yo de todo esto. Si has leído hasta aquí está claro que tú pretendes sacar algo. Yo también quiero. Por favor, dímelo clara y abiertamente: ¿se pagará, aunque sea en especie? ¿Cuánto o qué? ¿Qué beneficios hay para mí? (Nota: «exponer mi trabajo ante una audiencia de X personas» y razones similares no suele ser un beneficio lo suficientemente jugoso, sino más bien tratar de venderme la moto).
Gracias por leerlo completo. Si, después de todo esto, crees que tienes una propuesta interesante, ¡no dudes en comunicármela!